Consigue el mejor lijado para un acabado perfecto

Antes de aplicar pintura, barniz u otros acabados o tratamientos, conviene preparar la superficie, eliminando irregularidades, imperfecciones, suciedad y restos de acabados anteriores. Por eso, es tan importante el lijado. Además de suavizar superficies ásperas o rugosas, eliminando astillas o mellas, proporcionando un resultado limpio y uniforme. Te contamos, de la mano de los expertos de Comercial Pazos, algunas de las claves que necesitas para obtener un buen lijado.

¿Por qué lijar es indispensable?

• Para preparar las maderas antes de pintar, barnizar o sellar.
• Lijar los bordes de las piezas antes de unirlas, permite un ajuste perfecto, facilitando el ensamblaje adecuado.
• Mejora del aspecto visual.
• Elimina imperfecciones visibles como astillas, arañazos y marcas o, incluso, manchas.
• Garantiza un acabado uniforme, una superficie lisa y agradable al tacto.
• Permite corregir imperfecciones como bordes ásperos, exceso de pegamento o madera desigual.
• Protege la madera del deterioro, sellando la superficie.

Lijar con papel vs lijadora eléctrica

Existen diferencias significativas entre lijar manualmente con papel de lija y usar una lijadora eléctrica. Ambas técnicas tienen sus ventajas y desventajas, y todo dependerá del tipo de proyecto, el nivel de acabado deseado, la comodidad del usuario y otros factores específicos de cada situación. Estas son algunas de las principales diferencias:

• Velocidad. Una lijadora eléctrica puede lijar mucho más rápido que hacerlo de manera manual. La acción eléctrica de la lijadora permite cubrir áreas grandes en poco tiempo, proyectos extensos o para trabajar de manera más eficiente. Sin embargo, a la hora de abordar las zonas pequeñas o de difícil acceso, merece la pena hacerlo con papel de lija.

• Esfuerzo. El lijado manual puede ser agotador, especialmente en proyectos que requieren mucho tiempo o superficies de gran tamaño. La lijadora eléctrica, por su parte, reduce el esfuerzo físico, haciendo más llevadera la tarea.

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• Acabado. La lijadora eléctrica proporciona una presión y un movimiento constante, lo que se manifiesta en un lijado más uniforme y consistente en toda la superficie. Con el lijado manual, es más difícil mantener la misma presión y movimiento en todo momento, por lo que siempre está el riesgo de que el resultado sea menos uniforme.

• Control. Aunque las lijadoras eléctricas permiten cierto control, el lijado manual proporciona una mayor precisión sobre todo el proceso. Esto es especialmente importante al trabajar en áreas delicadas o en proyectos que requieren más cuidado

• Formatos. Las lijadoras eléctricas, por otra parte, se presentan en varios formatos. Pueden ser orbitales, de banda, de disco, etc., y se adaptan a diferentes tipos de superficies y tareas. Mientras tanto, el lijado manual ofrece una gama más limitada de movimientos y técnicas. Sin embargo, cada vez haymás formatos que facilitan la tarea. Uno de ellos, nos lo han enseñado en Comercial Pazos. Se trata del plato lijador manual con velcro, de Mirka, una almohadilla de 150 mm de diámetro, ideal para repasos puntuales y que puedes usar directamente con tus discos de lijado con velcro convencionales.

¿Sabes qué quiere decir el número del papel de lija?

Se refiere al de los granos abrasivos en la superficie del papel, que se expresa en términos de “granos por centímetro cuadrado” (GPC) en los sistemas métricos. Entonces, si el número del papel es alto, quiere decir que caben muchos granos por centímetro cuadrado. Un papel de lija de grano alto tendrá una superficie más fina y eliminará menos material con cada pasada. Por ejemplo, un papel de lija de grano 20 tendrá el grano más grande y será más abrasivo, eliminando más material, que uno de que uno de 200, que será más fino. La escala de grano generalmente va desde el 40 (grano grueso) hasta más de 2.000 (grano muy fino). Así nos lo explica Jesús Pazos, de Comercial Pazos, en este vídeo.

Las limas y escofinas también alisan

Tanto las limas como las escofinas son herramientas que se utilizan para dar forma y suavizar materiales mediante el proceso de limado. Aunque no son técnicamente lijadoras en el sentido tradicional, ya que no emplean papel abrasivo, desempeñan una función similar al eliminar material y alisar.

Las limas son herramientas manuales con una barra metálica y una serie de dientes cortantes en una o ambas caras. Se usan principalmente para dar forma y refinar bordes de metal y madera, y, como decíamos, eliminar residuos y nivelar.

Las escofinas, por su parte, son similares a las limas, pero con dientes más gruesos y abrasivos. Son especialmente útiles para eliminar material rápido y dar forma a superficies de madera, plástico y otros materiales blandos. Nos gustan las que nos han recomendado en Comercial Pazos, de la marca Narex, y que vienen en un pack de tres escofinas de acero al carbono endurecido, con el picado realizado a mano. Vienen con hojas de media caña, plana y cilíndrica de 200 mm.

Entonces, aunque no sean herramientas de lijado en el sentido convencional, las limas y las escofinas pueden ser parte de un conjunto de herramientas para trabajar superficies y eliminar desniveles o irregularidades.