Empieza a preparar y organizar tu casa antes de las fiestas

Todos los días del año, tu casa debe estar organizada, limpia y sin desperfectos, pero sabemos que eso, en la práctica, a veces se nos complica y dejamos tareas, arreglos y mejoras pendientes para hacerlas «un día de estos». Pues, bien, ha llegado ese día. No lo dejes estar para que, cuando lleguen las fiestas, tengas todo perfecto y funcionando.

Lo primero, una limpieza profunda

Darte el palizón justo los días señalados cuando vienen tus invitados a celebrar las fiestas es un sobreesfuerzo innecesario. Para asegurarse de que tu hogar esté limpio, ordenado y acogedor para recibir a familiares y amigos, hazlo unos días antes.

• Planifica: Antes de comenzar, crea un plan de limpieza detallado que enumere todas las tareas que deseas realizar en cada habitación. Esto te ayudará a mantener el enfoque y a no olvidar ningún área importante.
• Despeja el desorden: Habitación por habitación. Esto implica guardar objetos en su lugar, organizar juguetes, papeles y otros elementos que estén fuera de su sitio.
• Limpia el polvo: Utiliza paños de limpieza o plumero para eliminar el polvo de todas las superficies, incluyendo estantes, marcos de cuadros, lámparas, muebles y accesorios.
• Lava las ventanas, cristales y espejos: Asegúrate de que estén libres de manchas y huellas dactilares.
• Aspira y friega los suelos: Ocúpate de las alfombras, que quizá requieren que las lleves al tinte. Si es así, llévalas con tiempo, pero recógelas un día antes.
• Lava las cortinas: Presta especial atención a las del salón y las de la habitación de invitados y zonas comunes, si es necesario.
• Limpia a fondo los baños: Inodoros, lavabos, espejos, duchas y bañeras, pero sobre todo, esos rincones que se escapan a la limpieza del día a día. Cambia alfombras y toallas.
• Limpia de la cocina: Lava los platos y utensilios que vayas a sacar los días de fiesta y tenlo todo preparado, además de los de uso diario; limpia los electrodomésticos, encimeras, fregaderos y estufas.

Deja tu cocina perfecta

Las cocinas se vuelven protagonistas de las casas y centro de reuniones para toda la familia durante las fiestas (y, en realidad, todo el año), por eso los profesionales de timbrit, la app para contratar servicios de reforma y mejoras del hogar, proponen cambios sencillos que consiguen crear una apariencia totalmente nueva y renovada. Una de las opciones es cambiar los frontales de los muebles de la cocina pintándolos. Otra opción más sencilla es cambiarles los tiradores. Si no quieres hacer mucho gasto, no te olvides de que las fiestas son el momento más exigente para esta estancia, por lo que revisa que las puertas del mobiliario cierren bien, que los electrodomésticos funcionen y que la zona de almacenaje esté limpia. No estará de más revisar también que los grifos no goteen y que la fontanería marcha a la perfección.

Revisa toda la instalación eléctrica

El árbol, la mesa, la decoración exterior, la música, el horno, la nevera… Todo utiliza electricidad, por lo que se hace imprescindible que revises toda la red antes de las fiestas. Fíjate en que los enchufes no solo funcionen, sino que también tengan un aspecto impecable. Asegúrate de que, de emplear regletas, no apliques toda la carga en una, sino que distribuyas la exigencia eléctrica en diferentes tomas. Si tienes luces en el exterior, ten en cuenta que los cables deben ser específicos para estar a la intemperie. Por último, comprueba todas las bombillas de la casa, para que no falle ninguna y tu casa siempre esté bien iluminada.

Garantiza el calor de hogar

No hay recuerdo más incómodo, que haber pasado frío en la cena de Nochebuena o de Noche Vieja. Mantener los radiadores a punto para estas fiestas es imprescindible. Esta es una tarea para hacer con tiempo, por ejemplo, con un mes de antelación para que, en caso de haber algún desperfecto que arreglar o algún aspecto que deba revisar un profesional, te dé tiempo. Empieza purgando los radiadores para conseguir una temperatura óptima. Para hacerlo, sigue estos pasos:

• Apaga la calefacción: Asegúrate de que el sistema de calefacción esté apagado antes de empezar. Deja que los radiadores se enfríen.
• Identifica los radiadores que necesitan purgarse: Observa tus radiadores y busca los que estén más fríos en la parte superior que en la zona inferior. Esto es un indicativo de la presencia de aire en el sistema.
• Encuentra la válvula de purgado: En la parte superior de cada radiador, cerca del extremo más frío, deberías ver una válvula de purgado. Esta suele ser una pequeña tapa o tornillo, que puedes girar con un destornillador.
• Coloca un recipiente debajo del radiador: Antes de purgar, coloca un recipiente o toalla debajo del radiador para recoger el agua que pueda salir durante el proceso.
• Usa la llave de purgado o destornillador: Con la llave de purgado, gira la válvula en sentido contrario a las agujas del reloj. Escucharás un siseo cuando el aire empiece a escapar del radiador. Mantén la válvula abierta hasta que comience a salir agua en su lugar. Esto significa que todo el aire ha sido eliminado y que tus radiadores ya están listos para funcionar.
• Cierra la válvula: Una vez que el agua fluye sin burbujas de aire, cierra la válvula de purgado en sentido de las agujas del reloj y asegúrate de que no caiga nada de agua.
• Enciende la calefacción: Una vez que hayas purgado todos los radiadores, enciende nuevamente el sistema de calefacción y verifica que los radiadores calienten de manera uniforme.

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Cinco soluciones para evitar los malos olores del baño

Del baño no nos podemos olvidar en estas fiestas. Los malos olores en un baño pueden aguarte la fiesta, por lo que si detectas que huele mal, es importante ponerle freno inmediatamente. Los malos olores pueden deberse a diversas razones. Estos pequeños problemas tienen solución, por lo que te animamos a ir arreglándolos, poco a poco, para que estén perfectos.

1. Falta de ventilación: Cuando no hay suficiente circulación de aire en la habitación, los olores se quedan atrapados.
   Solución: Comprueba que el baño esté bien ventilado. Puedes abrir una ventana, encender el extractor de aire o instalar un ventilador de techo si no lo tienes. En caso de que no puedas hacer nada de esto, abre la puerta y
   deja que circule el aire.
2. Problemas en la tubería: La causa de los malos olores también pueden ser algún problema en las tuberías, como bloqueos con algún elemento o acumulación de desechos.
   Solución: Es posible que necesites cambiar alguna gomita, arandela o tubería o, en su defecto, llamar a un fontanero para que inspeccione y repare cualquier obstrucción o problema en el sistema.
3. Fuga de agua: En el sello del inodoro o en una tubería hace que los gases de alcantarillado entren en el baño y causen mal olor.
   Solución: Inspecciona cuidadosamente todas las conexiones de tuberías y el sello del inodoro para detectar fugas. Si encuentras una fuga, repárala. Si se trata del sellado, retira la silicona vieja y sella la junta entre el inodoro y el suelo. Seguro que resuelves el problema.
4. Desagüe seco: En algunos casos, el mal olor tiene su origen en un desagüe que no se utiliza con regularidad y que se ha secado.
   Solución: Vierte agua en los desagües que no se usan.
5. Desperdicios en el cubo de basura: Si tienes un bote de basura en el baño y no lo vacías con regularidad, los residuos pueden generar malos olores. Esto, como ves, es de muy fácil solución.
   Solución: Vacía la papelera a diario y emplea bolsas de basura con cierre hermético o perfumadas para evitar que los olores se propaguen.

Prepara la habitación de los invitados

A veces, lo dejamos para el final, pensando que se trata de poner unas sábanas en el sofá cama ¡y ya! Pero, si tienes invitados estas fiestas, hazles sentir como que están en el mejor hotel del mundo. Si quieres ser un excelente anfitrión estas navidades, sigue estos consejos que te contamos a continuación:
• Primero, decide dónde van a dormir los invitados. Si tienes una habitación o saloncito extra, mejor que mejor. Si no, nos vale el sofá cama del salón o la cama nido del cuarto de los niños. Cualquiera que sea tu opción, ocúpate de que sea fácil de recoger todas las mañanas para que no esté todo en medio.
• La habitación. Si es posible contar con una cama en una habitación extra, asegúrate de poner sábanas limpias, que las almohadas sean cómodas y que haya mantas suficientes.
• También es importante que tus invitados tengan espacio para dejar sus maletas y su ropa. Si puedes desocupar una cajonera o parte de un armario, te lo agradecerán.
• Es mejor dejarles toallas limpias encima de su cama para que sepan cuáles les corresponden y que están sin usar. Facilítales amenities.