Para renovar las paredes de tu casa, no es necesario hacer grandes obras. Con pequeñas reparaciones, te aseguramos que estas quedarán como nuevas sin gastarte un gran presupuesto ni invertir demasiado tiempo en ello. Estos consejos te serán útiles para hacer desaparecer los agujeros, las fisuras y las grietas, quitar el gotelé, clavar adecuadamentelimpiar las superficies difíciles, etc. Lee, lee.
1 RELLENAR AGUJEROS Y GRIETAS
Aunque en nuestra revista Brico, hemos tratado en reiteradas ocasiones cómo tapar agujeros y grietas, nunca está de más recordarlo. Si vas a pintar o empapelar las paredes, antes tendrás que rellenar los desperfectos para que esta quede bien lisa y el resultado sea perfecto. Hazlo siempre con masilla de calidad, ya que merman y se agrietan bastante menos que las que, a primera vista son más económicas, pero que a la larga salen más caras. Empieza vaporizando agua sobre la zona a rellenar, ya que favorecerá el agarre del producto. Aplica la masilla en cantidad, presionando bien para que no se generen burbujas. Cuando se seque, la masilla mermará y tendrás que aplicar otra capa vaporizando agua de nuevo sobre la superficie. Si el hueco a rellenar es grande, aplica la masilla en capas finas dejando secar entre ellas. Deposita capas hasta que sobresalga por encima de la superficie.
2 QUE LOS TACOS NO TE DEN PROBLEMAS
En ocasiones, los tacos pueden dar problemas, sobre todo, cuando vamos a colgar algo de los tornillos y los tacos se salen, o cuando el agujero es demasiado grande y el taco se cuela por él. Para evitarlo, compra tacos con cuello que evitará que se introduzcan dentro de la pared y se pierdan. Si un taco se sale, aplica un adhesivo de montaje espeso antes de introducirlo y deja secar. También puedes revestir el taco con masilla de dos componentes e introducirlo. Por último, cuando la pared es demasiado dura y solo la puedes taladrar hasta la mitad, no dudes en cortar la punta del taco para que entre todo.
3 SUPERFICIES SIN UNA GOTA DE GRASA
Las paredes de algunas zonas de la casa, como las cocinas y garajes, por ejemplo, tienen manchas de grasa sobre las que es imposible pintar. Puedes eliminarlas (o en parte) frotando con una solución de amoníaco y agua al 20%. Colócate mascarilla y guantes, y ventila la habitación al máximo. No utilices estropajos de metal o de color verde, porque podrías manchar la pared. En su lugar, emplea un cepillo de raíz y una bayeta. Deja secar durante uno o dos días y aplica una selladora acrílica sobre la pared. Cuando esté seca, pinta de nuevo. Lo mejor es emplear una pintura lavable de alta calidad. Son más caras, pero podrás limpiar cualquier mancha con un simple trapo húmedo.
4 JUNTAS DEL EMPAPELADO PERFECTAS
El papel pintado queda muy bonito
y es agradecido, pero las juntas son, probablemente, las zonas más complicadas de rematar. Para evitar que se levanten con el tiempo y el papel empiece a despegarse por ahí, acuérdate de encolar las hojas, procurando que los bordes del papel queden bien impregnados. Una vez pegado a la pared, pasa un cepillo de empapelador desde el centro hasta los bordes. Termina el trabajo pasando por las juntas un
rodillo especial (de goma, madera o metal), insistiendo hasta que se peguen y queden casi invisibles. Si se levantan, aplica un poco más de cola y pasa el rodillo otra vez.
5 ¿CÓMO QUITAR EL GOTELÉ?
Ya hay pocas casas que lo llevan, pero si la tuya aún tiene esta técnica en tu pared de obra, puedes cambiar ahora mismo su estética. Hoy en día se usan más las paredes lisas, sobre todo por las posibilidades que tienen para hacer lo que quieras y, mejor aún, para facilitar la tarea si a los pocos años quieres renovar las paredes otra vez. Afortunadamente, en la actualidad puedes encontrar productos muy eficaces para retirar el gotelé y alisar las paredes. Para aplicarlos, tendrás que limpiar la pared con un paño con agua y un cepillo, y dejar secar durante 24 horas. Mezcla la pasta o el producto específico con agua en un cubo de boca ancha, agita con una varilla mezcladora y cubre la superficie que tiene gotelé con la pasta resultante, ayudándote con una llana de metal de cantos lisos. Deja secar el tiempo que indique el fabricante y extiende otra vez con una capa más fina y menos espesa. Pasadas unas horas, ya podrás pintar de nuevo.
Si quieres conocer más trucos para tus paredes, no te pierdas el número 286 de tu revista Brico. Para conseguirlo, llámanos al 916326251 o escríbenos a suscripciones@revistabrico.es